¿Quién no ha fantaseado alguna vez en tener una experiencia de sexo anal? El temor al dolor es uno de los miedos que hace no dar el primer paso, sin embargo existen juguetes sexuales que harán convencerte para que lo pruebes. Te darán tranquilidad y estarás a gusto con la nueva experiencia, disfrutándolo en solitario o en compañía. Este singular juguete anal es el llamado plug o tapón anal, que tiene forma de cono y está especialmente diseñado para ser insertado dentro del ano. Tiene la punta delgada, que garantiza una penetración y una dilatación suave del esfínter, que puede dilatarse mucho más de lo quedes imaginar, y tiene una base ancha para evitar su inserción en el recto.
Debemos realizar la penetración de forma lenta y progresiva, sin brusquedades. Es necesario indicar que el ano no tiene una lubricación natural, por lo que siempre hay que utilizar un lubricante anal base agua, para ir lubricando la zona poco a poco y delicadamente. Una vez esté lubricado, y el ano esté totalmente relajado, es cuando se puede introducir el plug. Desaconsejamos usar lubricantes con efecto adormecedor o desensibilizador, puesto que puede restar placer a la experiencia y eliminar la sensación de dolor, que es la que nos puede indicar, si alguna cosa no está bien.
El plug anal sirve para ejercitar el esfínter de manera dilatadora para proporcionar a la persona que lo usa, ya sea hombre o mujer, una experiencia de placer anal maravillosa. El ano contiene numerosas terminaciones nerviosas que pueden producir placer al ser estimuladas. Diferenciamos entre plugs dilatadores para hombres y mujeres, y plugs prostáticos exclusivos para los hombres, estos están diseñados para estimular la zona de la próstata, que contiene aún más terminaciones nerviosas. Y si quieres disfrutar de vibraciones, también existen plugs vibradores, para sentir sus movimientos. Los tamaños de los plugs pueden variar, pero es aconsejable que los principiantes usen los tamaños más pequeños, para que la zona del ano, que es muy sensible, vaya habituándose a una nueva intromisión de su intimidad. Así que sin más preámbulos aprendamos a disfrutar de nuestros traseros..